Es el título de una película de mi admirado Woody Allen, del que disfruté buena parte de sus comedias, por no decir de todas. Del resto bastante menos, e incluso en algunas de este último grupo me aburrí soberanamente. Pero siempre le agradeceré los muchos buenos ratos que me ha hecho pasar con su elegante sentido del humor y con sus inteligentes, fecundos y ágiles diálogos. Espero que Dios le de salud y fuerza para seguir divirtiéndome con su trabajo por mucho tiempo.
Foto tomada del sitio dissenyatxtu.blogspot.com/2011/06/restauraci... |
En mi más remota infancia -segundo lustro de los años cincuenta, recién cruzado el ecuador del pasado siglo, hace unos días en realidad- me sentí absolutamente fascinado por el aparato de radio que había en la casa de mis padres en El Entrego (Asturias), en el corazón de la cuenca minera del Nalón. A parte de que por aquella caja de madera se oía hablar a otras personas, música, ruidos... Lo que no dejaba de asombrarme eran los muchos nombres de ciudades del mundo que estaban escritos en el dial. Era un mapamundi sin mapa que no me cansaba de mirar. Unas veces con permiso y otras a escondidas, acercaba mis dedos con total reverencia al botón que movía el indicador del dial poniéndolo sobre el nombre de alguna ciudad lejana con la esperanza de verme en ella en cuanto lo hiciese, pero sólo había ruidos. Gracias a ellos, mi esperanza siempre seguía intacta, pues debía pensar que había alguna avería (como cuando un coche no arranca) y en otro momento, tal vez, lograse ser teletransportado.
La primera canción que recuerdo haber aprendido.
Aquella radio fue también la fuente de mis primeras discusiones con mi madre porque a veces emitía alguna canción de Jorge Negrete que mi madre disfrutaba pero añadiendo siempre: “Probín, con lo bien que cantaba y ya está muertu, tan joven”, naturalmente, a mí me sorprendía, ¡estaba cantando por la radio! Los muertos no dicen nada, mi madre replicaba: “ye un discu, fíu”. Por más que me lo explicaba, lo del disco no lograba imaginarlo y en casa no había, así que nos enzarzábamos en una discusión que ella zanjaba dejándome por imposible pero mi mente seguía dándole vueltas a ese fenómeno de poder cantar después de muerto o a su imposibilidad. Desde entonces, la verdad es que no hice demasiados progresos en mi conocimiento de la física cuántica, la filosofía, el misterio de la muerte y muchas cosas más, pero, quizá aquellas disputas marcaron el primer punto de inflexión en el desarrollo de mi cerebro que, como pueden ver, tampoco es para tirar cohetes. Mas queda camino y tiempo para seguir aprendiendo y ahí voy andando.
He pensado utilizar esta entrada a modo de carpeta donde ir colocando todos los archivos de mis charlas en la radio (no están todos, hay alguno desaparecido) para que, cuantas personas consideren interesante escucharlas puedan hacerlo, pues no quedan grabadas en el sitio Web de la emisora.
Además de agradecer, y enormemente, a cuantos tienen y tengan la amabilidad y deferencia de poner sus ojos -y ahora también oídos- en este sitio, quiero advertirles de que, si ya escribiendo no logro -a pesar de mi afán- evitar la imperfección, en mis charlas en la radio todavía resulta más patente lo poco que me cunde el esfuerzo. Eso, a pesar de la gran ayuda que me da José Ángel, un verdadero artista de las ondas al que da gusto verle trabajar. Por cierto, nunca imaginé que estar en la radio fuese tan divertido y adictivo. Sin duda alguna, que pueda vivirlo así, ha de tener mucho que ver con la excelente calidad humana de las personas con las que allí me encontré: Ainhoa, José Ángel y Txema, nunca os agradeceré lo bastante vuestra ayuda y la oportunidad que me brindáis. Muchísimas gracias.
Entre mis muchos defectos figura el de tener muy poca agilidad mental y una flaca memoria, lo que en una intervención en directo se nota. Pero bueno, comencé el penúltimo viernes del pasado octubre y desde entonces ahí sigo todos los miércoles; aún no me han echado. En fin, ríanse, disfruten y, si les va bien, hagan suyas algunas ideas, sugerencias y actitudes importantes, que también las hay, con el fin de conducir sin miedo y conducir mejor, al cabo, es el verdadero objeto de mi trabajo.
La radio que ahora tengo. |
Por supuesto, si alguno de ustedes desea hacerme llegar alguna pregunta, sugerencia, crítica, corrección... pueden utilizar los medios de contacto de que dispone OYE RADIO BASAURI (95.1 FM) o el correo y teléfono que aparece en www.conducirsinmiedo.com Será un placer corresponder a su atención. Muchísimas gracias.
Esteban
CHARLAS CON JOSÉ ÁNGEL EN OYE RADIO BASAURI
1ª CHARLA (21-10-2011). Básicamente, presentación del libro Conducir sin miedo.
2ª CHARLA (26-10-2011). ¿Quiénes conducen mejor, mujeres u hombres? Conducir en otoño y conducir con viento.
3ª CHARLA (2-11-2011). Algo más sobre conducir con viento fuerte, mujeres-hombres (Bertha Benz), "carril reversible" y II Salón del Automóvil de Asturias.
4ª CHARLA (9-11-2011). Conducir con lluvia y aquaplaning.
5ª CHARLA (16-11-2011). Posible cambio de algunas normas para motos y taxis.
Rotondas.
Rotondas.
6ª CHARLA (23-11-2011). Rotondas e intermitentes.
7ª CHARLA (7-12-2011). Comentamos noticia sobre accidentes puente Constitución y actitudes para evitarlos. Adelantamientos por la derecha.
8ª CHARLA (14-12-2011). Tráfico (DGT) abre plataforma digital al público. Inmovilización del vehículo y golpe por atrás.
9ª CHARLA (21-12-2011). Comentario sobre noticia de pérdida de control en la autopista, ruedas y algo sobre qué hacer si falla el freno.
10ª CHARLA (28-12-2011). HIELO 1.