jueves, 13 de agosto de 2015

¿TRES COSAS QUE NUNCA DEBES HACER CON EL EMBRAGUE?

“Tres cosas que nunca debes hacer con el embrague” es el título de un artículo de la revista Auto Bild con el que me encontré hoy en el blog de Asextra (Asociación de Examinadores de Tráfico y que les aconsejo leer para entender mejor esta breve entrada haciendo click en cualquiera de los nombres mencionados. Imaginando que ya lo han hecho, paso a razonar mi desacuerdo con el primero de dichos puntos con el fin de que nadie se llame a engaño.

Ay, ese pedal de la izquierda...
Y cuánto ayuda el conocimiento de las cosas
a utilizarlas bien y aprender más rápido.
Respecto a los puntos 2 y 3 totalmente de acuerdo; respecto a un detalle del encabezamiento del artículo y el punto 1, no.

El artículo comienza afirmando: “Aprobados por la autoescuela”. El único organismo que tiene competencias para aprobar o no un examen de conducir es la DGT que, formando parte del organigrama del Ministerio del Interior, lo hace a través de sus jefaturas provinciales. 

En el punto 1 se afirma: “muchos profesores de autoescuela aconsejan mantener el embrague engranado mientras esperas a que el semáforo pase de rojo a verde. Lo hacen porque así es más fácil arrancar y hay menos posibilidades de que se cale en pleno examen.” 

Es cierto que muchas veces se indica a los alumnos que mientras están detenidos en un semáforo esperen con el pedal del embrague pisado a fondo y la primera velocidad engranada (el embrague no se engrana, sólo se conecta o se desconecta), pero no por las razones citadas, que repito y rebato:


a) “así es más fácil arrancar”. Esto nada tiene que ver con la facilidad del arranque, en realidad maniobra denominada como iniciar la marcha. 

b) “hay menos posibilidades de que se cale en pleno examen”. Tampoco es cierto, porque esto nada tiene que ver para calar o no el motor.

La única razón por la que muchos profesores de formación vial indicamos al alumno (tampoco siempre ni a todos) que mantenga el pedal del embrague pisado a fondo con la primera velocidad engranada es para ganar tiempo al reiniciar la marcha cuando el semáforo cambie a luz verde, porque de lo contrario, en bastantes ocasiones el semáforo volvería a ponerse en rojo sin habernos movido y, naturalmente, debemos procurar entorpecer lo menos posible al resto de usuarios de la vía. 

¿Inconvenientes? A lo sumo se daña antes el cojinete de empuje (comúnmente llamado “collarín”), sin que esto suponga, excepciones a parte, tener que cambiar el mecanismo de embrague antes de acabar la vida útil del coche que, con un uso intenso y duro del mismo, suele rondar los 300.000 km en un tiempo aproximado de unos cuatro años.

Por supuesto, esta recomendación (como todas las demás) debe ser convenientemente explicada, razonada y demostrada por el profesor con el fin de que el alumno pueda decidir por sí mismo con pleno conocimiento de causa y con criterio propio cuando ya tenga su permiso de conducir y realice esta actividad solo. 

Hasta en un coche de escuela, este mecanismo puede durar su vida útil.
Fuente: www.desguacesvehiculos.es
Curiosamente, la mencionada y conocida revista -un medio especializado en el mundo del automóvil, por cierto- omite información sobre un extendido e inadecuado uso del embrague que da lugar a un desgaste prematuro de su mecanismo y a posibles averías en él que hasta pueden contagiar a la caja de cambios. Escribí sobre esta mala costumbre -vídeo incluido- hará poco más de año y medio, pueden verlo aquí

Con su permiso, y una vez más, me tomo la libertad de recomendarles que sean prudentes y cautos antes de aplicar, ya no sólo muchos de los consejos que sobre automóviles se publican en Internet, también lo que dice la prensa escrita especializada y clubs de automovilistas, ente otros. Y no lo digo sólo por el mencionado artículo porque, desafortunadamente, no es un hecho aislado. 

Ustedes disfrútenlas, pero eviten que su espíritu crítico y su independencia de criterio se tomen vacaciones.

19 comentarios:

  1. Hola Esteban: Gracias de nuevo por estos útiles consejos, especialmente el último referente a la independencia de criterio.
    Yo llevo un coche automático, y para mí todo eso de los embragues en los semáforos pasó a 'mejor vida', lo cual veo como una liberación, a la vez que sigo controlando las marchas a través del secuencial.
    Pero vuelvo a la independencia de criterio. Es importante probar el coche y conocerlo, y no dar el rango de 'dogma de fe' a las recomendaciones. Hay cosas que se dan por ciertas en coches automáticos que son rotundamente falsas en el mío y hay que ir con mucho cuidado con ello. Hay pocos sitios donde la gente parezca saber realmente de coches y su funcionamiento, uno de ellos, desde luego, es el blog de Don Arturo.

    Saludos y gracias de nuevo por tus consejos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Elisa:
      Gracias a ti. Siempre me ha llamado la atención la falta de criterio a la hora de gastar una respetable cantidad de dinero en un coche, sobre todo teniendo en cuenta que además uno va dentro, y familia, amigos... es increíble. Y es un asunto que conozco bastante bien porque hasta trabajé un tiempo haciendo encuestas sobre ello.
      El cambio manual, en general, me parece bastante obsoleto, claro que hasta finales del pasado siglo los automáticos tenían serias desventajas, al menos en Europa: coches y motores grandes y demasiado consumo; o lo contrario: coches y motores muy pequeños para poder utilizar el cambio de variador continuo (como los ciclomotores). Los cambios robotizados y tipo DSG (una evolución del anterior, en realidad), han supuesto unir lo mejor de dos mundos, hasta no hace muchos años antagónicos. ¿Pero ahora? Un cambio manual, prácticamente no tiene sentido, y no acabo de entender porqué tantos fabricantes se resisten a ofrecerlos.
      También es cierto, que si el coche se usa muy poco en ciudad y mucho en carretera, no se disfrutan las ventajas del automático, ya que la mayoría de los recorridos se hacen por autopista o autovía y apenas si se cambia de velocidad. Sin embargo, curiosamente, ocurre lo contrario; y aun así, la mayoría prefieren pelearse con un tercer pedal y una palanca. Pues bueno...
      Sobre los “dogmas de fe”, no salgo de mi asombro, Elisa, con tristeza compruebo que cada vez gozan de más predicamento, para todo, y están tan extendidos entre los jóvenes...
      Don Arturo es un auténtico maestro, desde luego, del que aprendí buena parte de lo que sé y al que le debo mucho, como bien sabes. Ni me siento capaz de describir lo que sentí cuando recibí su prólogo, ¡qué tranquilidad y qué paz! Salvando las distancias, es como un doctorado.Y ahora que lo menciono, me da mucha alegría comprobar que de vez en cuando me tropiezo con jóvenes que lo conocen y estiman mucho, el último hará unas dos semanas. ¡No todo está perdido!
      ¡Saludos y buen fin de semana!

      Eliminar
    2. Don Arturo ofrece ideas propias que él mismo ha contrastado. La mayoría de la prensa actual (en cualquier tema) parece un insípido 'copia y pega'.
      Quizás algún día volveremos a querer aprender y entender antes de aceptar dogmas.
      Saludos!

      Eliminar
    3. Exactamente, Elisa. Y además, don Arturo siempre se ha esforzado en aplicar el método científico a sus pruebas, lo cual es muy laborioso, como sin duda sabes mucho mejor que yo, y más aún hace varias décadas. Así se ha ganado este hombre el respeto y prestigio que tiene, en ese pulso constante contra el rigor y el esfuerzo.
      Respecto a la prensa y el resto de los medios de comunicación, en general, es muy lamentable la falta de seriedad de la que hacen gala y el descaro con el que se han convertido en la voz de su amo.
      Me aferro a la esperanza que expresas al final, pues, a pesar de todo, también hay hechos objetivos para ello.
      ¡Saludos!

      Eliminar
    4. A ver si es verdad! Saludos!

      Eliminar
  2. Dichoso pedal que ocasiona numerosos quebraderos de cabeza.
    Después de arrancar, cuesta poner el vehículo en movimiento si no se tiene cogido el punto justo al embrague. Y luego está la variedad de presión que se debe aplicar: unas veces el protagonista está muy duro y si coges otro vehículo la presión debe ser menor para que realice su función. Vamos como la vida misma, unos se pasan y otros no llegan.
    ¡Feliz fin de semana!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Feliz fin de semana, amigo!
      Describes muy bien los inconvenientes del cambio manual y te aconsejo vivamente que cuando te plantees cambiar de coche, por lo menos, pruebes uno con cambio DSG o similar, aunque tengas que alquilarlo. ¡Te va a encantar!
      Un fuerte abrazo.


      Eliminar
  3. Vengo a disfrutarte
    Embrague es el acelerador??
    no se mucho de autos.
    jajajja
    Es por eso que pronto tendré uno nuevo
    mil besos poeta

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Gracias, Mucha!
      Pero no me des este disgusto, mujer. Y encima te ríes... Bueno, es salud, disfrútala.
      Los autos con cambio manual tienen tres pedales, el de más a la izquierda es el que actúa sobre el mecanismo de embrague conectando o desconectando con él el motor del cambio de marchas y de las ruedas. Se pisa a fondo después de soltar el acelerador para seleccionar la marcha que necesitamos con la palanca, se suelta después por completo y se vuelve a acelerar. También se pisa a fondo (desembraga, desconecta) cuando vamos a parar totalmente el auto, si no las ruedas seguirían conectadas con el motor y al parar estas con el freno detendrían el funcionamiento del motor, lo “calaríamos”.
      ¿Nunca has conducido un coche con cambio manual? Sé que en EE. UU se utilizan poco, pero tengo entendido que en Argentina sí se usan bastante. En Europa siguen siendo mayoría, pero poco a poco, entre híbridos, eléctricos (ambos llevan siempre cambio automático) y el cambio DSG que está utilizando Volkswagen (imitado por otros fabricantes), van perdiendo protagonismo lentamente.
      En el post anterior te dije algo sobre los coches de los que me hablaste, supongo que lo habrás visto, pero por si acaso...
      Ese título de poeta que me otorgas tan generosamente es un tesoro. ¡Muchas gracias!
      Feliz fin de semana. Un abrazo.

      Eliminar
  4. Muy interesante Esteban. Gracias por siempre compartir entradas tan instructivas. Linda noche!!!

    ResponderEliminar
  5. Interesante, justo el otro dia debatía con mi marido sobre esta misma cuestión, a mi en la autoescuela, me enseñaron a mantener pisado el embrague hasta que el semáforo cambie a verde, y él cada vez que me ve hacerlo...... se vuelve loco porque dice que eso no hace mas que dañar el embrague y que no es necesario. Particularmente encuentro mas cómodo dejar el coche en punto muerto, en lugar de estar pisando el embrague, pero como me enseñaron así, pues a veces lo piso durante el semáforo, y me habia surgido esa duda: si es bueno o malo, o si es recomendable o no.
    Gracias por la explicación!
    saludos
    Marisa.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Dices bien, Marisa: es más cómodo esperar en punto muerto y con el pie izquierdo en reposo, es lo más natural y se suele llegar a ello de forma espontánea a medida que uno mismo va tomando confianza en iniciar la marcha de un modo similar al resto de los conductores. Tal como comenté en la entrada, en la autoescuela se suele hacer lo contrario, pero ni siempre ni con todos los alumnos, sólo con el fin de ganar algo de tiempo al principio y de que el alumno se sienta seguro de que ya está en primera, pues es bastante habitual que las primeras veces que se circula en ciudad y con bastante tráfico, por querer hacerlo demasiado rápido, se precipite y ponga tercera o quinta, con lo cual se cala el coche, aumenta la tensión, la palanca no se mueve porque se deja en la marcha equivocada (se ve hacia adelante), se vuelve a calar, la tensión emocional se dispara, el semáforo vuelve a rojo y los que tenemos detrás se desesperan.

      Es más mucho más fácil evitar todo eso si se espera en primera y con el embrague pisado; el profesor debe explicarlo, y a medida que el alumno avanza y se va sintiendo integrado y cogiendo fundada confianza ir abandonando esta forma de actuar, dejándola sólo para cuando esté en semáforos que duran poco tiempo en rojo, detenciones para ceder a peatones que cruzan ágiles, stops, cedas el paso, retenciones rápidas o situaciones similares, en las que yo mismo, suelo actuar así y como supongo que tú lo harás. Y tu marido, porque cuando se cede a los vehículos de una vía transversal detenidos ante un stop, por ejemplo, aunque haya bastante tráfico, es fácil que algún conductor retenga un poco y nos invite a salir, cosa que debemos hacer con agilidad (si es seguro) pues quien nos ayuda a pasar no pretende detenerse, sólo darnos el tiempo necesario para reanudar la marcha.

      No obstante, te puedo asegurar que por hacerlo así algunas veces al embrague no le pasará nada, siempre que el pedal esté completamente pisado, si está en o cerca del punto de fricción (donde empieza a tirar el coche hacia adelante) sí que se somete a mucho esfuerzo: por un lado se le hace llegar algo de movimiento del motor a las ruedas y por otro impedimos que estas giren pisando el freno.

      En principio, los coches de escuela son a los que más se les castiga el embrague, y aún así, normalmente llegan y hasta superan los 300.000 km sin necesidad de cambiarlo, aunque sí es cierto que para ese kilometraje ya se suele notar bastante duro el pedal y algún ruido de desgaste en el cojinete de empuje (el collarín), sobre todo en parado y en punto muerto. Normalmente, con un uso no profesional del coche este se cambia mucho antes de llegar a esa cifra de kilómetros y sin que se aprecie ninguna anomalía en el mecanismo de embrague. Podéis estar muy tranquilos.

      Entre muchos conductores, vendedores de coches, mecánicos, algunos de mis colegas (también) hay muchos prejuicios y tabúes fuertemente arraigados completamente falsos. Pero cuando te surja alguna duda (incluyo a tu esposo), pregúntame, por favor, igual tardo un poco en contestar (como hice ahora y si no es urgente, perdón), pero lo haré con mucho gusto.

      No sé muy bien en otros países, pero en este, ya sabes que tenemos una fuerte tendencia al extremismo aferrándonos con fuerza a todo tipo de filias y fobias, a blanco o negro (parece que no queremos ver los grises) a Barça o Madrid... y así para todo. Y así nos va, claro. Pero espero que a ti te vaya muy bien, me ha hecho ilusión “verte” por aquí, muchas gracias por la visita y hasta cuando quieras, Marisa.
      Feliz fin de semana. ¡Saludos!

      Eliminar
  6. Te pido disculpas, Esteban. No me has entendido, y es culpa mía. La explicación del uso del embrague es estupenda. Lo que yo critico es que nos culpen a los Profesores de Formación Vial de que los malos usos es por culpa de una mala praxis en nuestra tarea formativa. No conozco a ningún compañero que forme en el uso del embrague de la forma que refleja el artículo de Auto Bild. Como tú bien argumentas, las explicaciones del punto uno no tienen lógica ninguna. Por lo demás estoy totalmente de acuerdo, y como bien dices, se podrían incluir alguna más. Espero ser más explícito la próxima vez y no causar estos malos entendidos. La crítica no es hacia ti, que estoy de acuerdo con lo que expones, sino al punto uno del artículo de Auto Bild. Te pido disculpas. Un saludo compañero.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No, no te disculpes, por favor. Soy yo quien debe pedirte perdón por haberte entendido mal, lo hago, y te agradezco mucho esta explicación.

      La verdad es que me parecía raro, pero no me di cuenta. Lo siento. Aunque he pensado más de una vez -te lo digo con toda franqueza y buena intención- que quizá seas muy impulsivo cuando escribes. Nos sobran los motivos para estar indignado por muchas cosas, desde luego, más cuando se siente y vive la profesión apasionadamente, como tú bien reflejas, pero a veces, por lo menos a mí me cuesta entenderte. Me esforzaré más de todos modos.

      Te agradezco muchísimo que hayas destacado mi entrada en tu blog, pero, no me hagas mucho caso porque yo de esto entiendo muy poco, tengo entendido que Google lo penaliza, no obstante es mejor que te informes porque no estoy seguro, te lo digo por si acaso.

      Te reitero mi gratitud. Buen fin de semana, compañero.
      ¡Saludos!

      Eliminar
  7. Siempre te leo Esteban, y mas ahora que empiezo a "soltarme" un poco mas, me ha costado pero al final me he decido, y la verdad es que, tampoco lo hago tan mal como pensaba! jaja incluso a veces me permito el lujo de compararme con algunas maniobras de otros conductores y pienso que lo hago bastante mejor que muchos de ellos a pesar de su experiencia. (aunque humildemente claro, aun soy una novata).
    SAludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Louise:

      Gracias por leerme siempre, me hace mucha ilusión. Por supuesto pregunta lo que que quieras cuando te parezca, si en algo te puedo ayudar lo haré con mucho gusto.

      Respecto a lo que cuentas, te diré que cuando empezamos a conducir solemos subestimarnos y dar por hecho que todos los demás conducen mucho mejor, y que ademas los estorbamos y provocamos un justificado enfado en ellos (encima), y muchas veces son falsas ambas cosas. Repetía un compañero y buen colega que tuve hace años “que en esta vida a todo hay quién gane, para lo bueno y para lo malo”. Y es verdad, tenlo en cuenta.

      Por otra parte, partiendo de la base de que todos somos humanos y cometemos errores, también es cierto que, conduciendo, salvo que sean muy muy graves, los vemos, corregimos y en paz. Normalmente, como mucho, sólo tendremos que hacer un gesto de disculpa y procurar que no nos vuelva a pasar, claro, pero nada más.
      Sobre ser novata, hay un dicho oriental muy sabio que dice: “Hace mejor su tarea un aprendiz atento que un sabio distraído”. Y creo que es completamente cierto, porque estando a años luz de ser sabio, yo lo he comprobado en carne propia. Me gusta que menciones la humildad porque además de ser una virtud es una condición “sine qua non” para aprender.

      Bien por esa suelta, Louise, sigue entrenando cuanto puedas, y sola siempre que tengas ocasión.
      ¡Saludos!

      Eliminar
    2. Hola Louise:

      Gracias por leerme siempre, me hace mucha ilusión. Por supuesto pregunta lo que que quieras cuando te parezca, si en algo te puedo ayudar lo haré con mucho gusto.

      Respecto a lo que cuentas, te diré que cuando empezamos a conducir solemos subestimarnos y dar por hecho que todos los demás conducen mucho mejor, y que ademas los estorbamos y provocamos un justificado enfado en ellos (encima), y muchas veces son falsas ambas cosas. Repetía un compañero y buen colega que tuve hace años “que en esta vida a todo hay quién gane, para lo bueno y para lo malo”. Y es verdad, tenlo en cuenta.

      Por otra parte, partiendo de la base de que todos somos humanos y cometemos errores, también es cierto que, conduciendo, salvo que sean muy muy graves, los vemos, corregimos y en paz. Normalmente, como mucho, sólo tendremos que hacer un gesto de disculpa y procurar que no nos vuelva a pasar, claro, pero nada más.
      Sobre ser novata, hay un dicho oriental muy sabio que dice: “Hace mejor su tarea un aprendiz atento que un sabio distraído”. Y creo que es completamente cierto, porque estando a años luz de ser sabio, yo lo he comprobado en carne propia. Me gusta que menciones la humildad porque además de ser una virtud es una condición “sine qua non” para aprender.

      Bien por esa suelta, Louise, sigue entrenando cuanto puedas, y sola siempre que tengas ocasión.
      ¡Saludos!

      Eliminar
    3. Hola Louise:

      Gracias por leerme siempre, me hace mucha ilusión. Por supuesto pregunta lo que que quieras cuando te parezca, si en algo te puedo ayudar lo haré con mucho gusto.

      Respecto a lo que cuentas, te diré que cuando empezamos a conducir solemos subestimarnos y dar por hecho que todos los demás conducen mucho mejor, y que ademas los estorbamos y provocamos un justificado enfado en ellos (encima), y muchas veces son falsas ambas cosas. Repetía un compañero y buen colega que tuve hace años “que en esta vida a todo hay quién gane, para lo bueno y para lo malo”. Y es verdad, tenlo en cuenta.

      Por otra parte, partiendo de la base de que todos somos humanos y cometemos errores, también es cierto que, conduciendo, salvo que sean muy muy graves, los vemos, corregimos y en paz. Normalmente, como mucho, sólo tendremos que hacer un gesto de disculpa y procurar que no nos vuelva a pasar, claro, pero nada más.
      Sobre ser novata, hay un dicho oriental muy sabio que dice: “Hace mejor su tarea un aprendiz atento que un sabio distraído”. Y creo que es completamente cierto, porque estando a años luz de ser sabio, yo lo he comprobado en carne propia. Me gusta que menciones la humildad porque además de ser una virtud es una condición “sine qua non” para aprender.

      Bien por esa suelta, Louise, sigue entrenando cuanto puedas, y sola siempre que tengas ocasión.
      ¡Saludos!

      Eliminar