viernes, 1 de enero de 2016

¿CÓMO SON AHORA LOS COCHES?

¿Un teléfono con ruedas? ¿Una conexión móvil a Internet que nos garantiza privacidad en la calle y entre las multitudes? ¿Un misterio? Más bien me inclino a pensar en esto último, ya que de unos cuantos años acá en la mayoría de los anuncios sobre publicidad de automóviles nos ocultan muchísima información técnica y la poca que ofrecen es casi exclusivamente en relación con consumos y emisiones tóxicas, supongo que más que nada por cumplir con la normativa vigente que obliga a ello desde hace tiempo. 

Fuente: www.channelbiz.es
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Aun así, y por lo general, con las mencionadas normas cumplen por los pelos, pues si se trata de anuncios impresos en periódicos, revistas o vallas publicitarias, en los dos primeros casos el texto es legible con lupa, o casi, y en el último soporte ni por esas, claro. Y cuando la oímos en televisión o radio, lo habitual es que lo digan tan rápido que se hace imposible percibir los datos. Datos, que por cierto, aún no he conocido a nadie que le interesen y menos que le sirvan de algo en su decisión de compra. Pero es la ley. 

En las últimas semanas del pasado año he visto varias veces en televisión un anuncio del Seat Ibiza que, francamente y por más que lo he intentado, no he logrado entender. Si desde hace ya más de una década existe el dispositivo llamado “manos libres” para los teléfonos móviles, si muchos de estos lo llevan incorporado desde hace tiempo, ¿qué ventaja aporta la forma de comunicarnos que se ve en el anuncio que pueden ver al final de este párrafo (y aquí)? Además con voz de robot, metálica y entrecortada, que más que una más o menos sutil propuesta a pasar una noche de placer mutuo parece una seria amenaza. No sé ustedes, pero a mí me hablan así y esa noche no aparezco por casa; si acaso al día siguiente, y con la más que probable intención de hacer la maleta y desaparecer sigilosamente sin dejar pistas. 


Puedo entender que la publicidad apele a nuestras emociones como potente motor de compra de los bienes o servicios que nos ofrece, pero que nos muestren alguna destacada virtud de sus productos, una al menos, algo... pues no, en este caso sólo exponen una supuesta ventaja que ya supera con notable diferencia cualquiera de los smartphones que hay en el mercado y los que había hace más de un lustro. Y encima lo utiliza la pasajera, ¿no le resultará mucho más cómodo y discreto atender esa llamada con su propio teléfono? ¿Todo el mundo tiene que enterarse de lo hacemos en cada momento? 

Sin duda, habrán visto ya que este anuncio da bastante de sí como objeto de análisis, pero no veo en él una sola razón para comprar ese coche, ni siquiera para pensar en él, más bien todo lo contrario: para descartarlo de inmediato. Por otra parte, esta campaña tiene que costar una cantidad de dinero considerable; y de lo malo malo, si esa empresa no emplease ni un céntimo de dinero público, bueno, de lo suyo gastan, como se suele decir, pero no es el caso. 

Me tiene muy intrigado y sorprendido de un tiempo acá por qué los fabricantes de coches, altos cargos de instituciones estatales y un diverso número de personas que ocupan cargos relevantes en numerosas instituciones relacionadas con el mundo del automóvil se empeñan tan insistentemente en querer imponernos las posibilidad de estar conectados en los vehículos, y no hablo de los sistemas que advierten de la presencia de animales salvajes en la calzada o sus proximidades, por ejemplo, cosa que puede ser de gran ayuda, no, me refiero a la supuesta e imperativa necesidad de que estemos conectados a Internet, porque, entre otras cosas, no veo ninguna necesidad en este aspecto. 

Hace años que podemos tener esta conexión casi en cualquier parte, casi todo el mundo dispone de un smartphone, con las tablets se puede hacer lo mismo, con un ordenador portátil también; cada uno de los pasajeros puede utilizar cualquiera de estos aparatos durante un viaje y si sólo va el conductor a bordo, el teléfono puede utilizarlo de forma perfectamente legal con “manos libres” (nada aconsejable, por cierto), y el resto de sus funciones cuando esté estacionado en un área de servicio o bar de carretera, luego entonces, ¿para qué más? ¿Llevar Wi-Fi en el coche para los pasajeros? También existe y es bastante asequible. No lo entiendo. Y menos aún que nos lo pretendan imponer. 

El cuadro de instrumentos de algunos Saab podía mantenerse así. o...
Fuente: www.binaryelectronic.com
En mi caso, si viajo como pasajero prefiero mil veces disfrutar del paisaje y de una conversación amena y agradable. Si voy conduciendo el teléfono no lo uso, salvo alguna emergencia auténtica, no pocas veces lo pongo en modo avión y bastantes otras lo dejo en el maletero del mismo modo, sin duda la mejor forma de evitar distracciones con este aparato. Y si conduzco de noche con acompañantes, les ruego que no los usen, la luz de las pantallas crea reflejos en cristales y espejos que resultan confusos y peligrosos además de restar contraste con respecto a lo que tenemos que ver fuera del coche, que es lo que importa. Y, sí, me gustan estas máquinas electrónicas, pero es como todo: cuestión de medida; de ningún modo estoy dispuesto a que sean un factor de riego, ni que me creen dependencia como si de una droga se tratase

Recuerdo con nostalgia cuando hará mas de veinte años ofrecía Saab en sus coches (con muy buen criterio) la posibilidad de apagar el cuadro de instrumentos dejando sólo visible el velocímetro. Ahora resulta que lo importante está dentro del coche y cuantas más pantallas tenga este mejor. Y no, y no. Lo importante siempre está fuera. Y cuanto más oscuro esté el punto desde el que observamos, mejor se ve lo que hay en el exterior. Sin olvidar que para manipular una pantalla táctil es necesario mirarla, los botones y la teclas se pueden memorizar y tocarlos sin quitar la vista de la carretera. ¿De verdad hemos avanzado?

... así, con el fin de ayudar en la concentración.
¿Por qué ahora nos quieren distraer?
¡Saben que nos podemos matar!
Fuente: www.forocoches.com
Volviendo a la publicidad, echo de menos con tristeza que ahora ya no nos hablen de las características propias de un automóvil. Ya no se menciona la potencia, ni cuántos cilindros tienen los motores, ni mucho menos algún dato de sus prestaciones, tampoco nos muestran cómo funcionan cosas que sí suelen mencionar como el ABS, el ESP, el avisador de cambio involuntario de carril, el de ángulo muerto, la frenada de emergencia automática, etcétera. Nos dicen que existen, que están ahí; alguna vez muestran algo en supuestos ideales en circuito, cuando en esos mismos lugares se pueden recrear situaciones complejas de tráfico que ocurren millones de veces cada día, ¿por qué no nos demuestran cómo actúan en estos casos? O la supuesta ventaja de que tantos coches ya no lleven ni rueda de repuesto, lo que significa quedarnos tirados con un reventón; o por qué no se utilizan elementos que nos indiquen que la batería está llegando a su fin, lo que también nos dejará tirados... Seguro, seguro que me dejo cosas en el tintero, pero por hoy creo que con estas son suficientes. En fin, creo que debemos cuidarnos muy mucho de que no nos deslumbre el brillo de “las nuevas tecnologías”, que muchas veces ni es para tanto, ni sirve para nada bueno. 

Así que antes de comprar un coche, si queremos tener las máximas posibilidades de acierto, entre otras cosas, se hace necesario consultar revistas especializadas y algunas páginas de Internet; aquí les dejo una muy buena, en mi opinión. El autor es el mejor probador de coches que ha habido y hay en España, y goza meritoriamente de un reconocido prestigio internacional: don Arturo de Andrés. Un auténtico maestro que siempre contará con toda mi gratitud.

Aprovechando que es un Seat Ibiza el modelo del anuncio que comenté antes, no me resisto a contar lo mucho que también me extraña que no destaquen de este modelo la posibilidad que tiene de ser equipado con una caja de cambios automática que es muy buena, máxime, cuando este tipo de cambio debería considerarse un importante sistema de seguridad activa que, curiosamente, nunca se menciona como tal. 


Les agradezco con toda mi alma la atención que me prestan y les felicito en este año recién nacido con algo que ya escribí en 2011, de mi modesta cosecha, desde luego, pero lamentablemente en pleno vigor. ¡Ojalá también logremos evitar este peligro entre todos! 

20 comentarios:

  1. Me quedo con este fragmento de esta primera entrada del año:
    "Si voy conduciendo el teléfono no lo uso, salvo alguna emergencia auténtica, no pocas veces lo pongo en modo avión y bastantes otras lo dejo en el maletero del mismo modo, sin duda la mejor forma de evitar distracciones con este aparato"
    Ya lo puse en alguna ocasión.
    ESTAR EN LO QUE ESTÁS
    Que fea costumbre de estar pendiente de todo menos de la carretera.
    ¡FELIZ 2016!

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    1. Muchas gracias madrugador; con el año, con el día, con el comentario...
      Efectivamente, sí lo has dicho alguna vez en esta tu casa, pero nunca está de más, por sencillo, elemental y obvio que resulte. Es un mensaje claro y corto, que además viene bien para todo, lo malo es que estos aparatos ya están haciendo estragos en muchas personas por la adición que crean, y una vez que se tiene la dependencia es muy difícil dejarla.

      Cuando ya hace unos años empecé a ver a niños con móviles recuerdo comentar entre compañeros que a ver quién era el guapo que les prohibiría utilizarlos conduciendo a partir de los 18, ya es difícil con los adultos...
      ¡Feliz Año Nuevo!
      Un abrazo.

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  2. Pues sí, es un gran misterio que se haga publicidad de un detector de fatiga y no de un cambio automático... ¡Feliz Año!

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    1. Perdona, Elisa, yo no veo ningún detector de fatiga en el vídeo. ¿Será que te sale otro?
      ¡Feliz Año!

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    2. Al final del anuncio, en letras sobreimpresas al lado del precio: indica que lleva pantalla táctil a color, llantas de 16 pulgadas y detector de fatiga...Saludos!

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    3. Cierto. Gràcies, Elisa.
      Anda que lo de la pantalla a color también... no va a ser en blanco y negro a estas alturas.
      Bona nit!

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  3. Todo un texto informativo y creativo para una buena conducción en carretera. Aunque yo no conduzca, me interesa que todo conductor lo haga bien, por mi bien y por lo el de otras personas.

    Gracias, genial maestro. Feliz 2016.
    Un abrazo.

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    1. ¡Muchas gracias, Marina!
      Es muy de agradecer la buena observación que haces de que, aunque no conduzcas, te interese que los que sí lo hacemos lo hagamos bien, por tu propia seguridad y la de todos.

      Muchas personas que no conducen, se expresan como si nada les importase el mundo del automóvil, pero el tráfico es un fenómeno que nos afecta a todos (mucho más para bien de lo que se dice) y sea cual sea el papel que hagamos en cada momento: peatón, pasajero y, por supuesto, conductor. Conviene que nos cuidemos. De ese modo, así también cuidamos de los demás automáticamente.

      ¡Feliz y venturoso 2016, amiga!
      Un abrazo.

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  4. soñar sin miedos
    Vivir sin miedos
    En mi caso te diria ansiedad
    MI cell en el auto lo conecto y hablo usando mis dos manos en el manejar
    Te cuento Mi Civic nuevo empezó a temblar cuando lo llevaba en la autopista a mas de 70 millas por hora es decir entre 65 y 74 vibraba
    Y salia el problema en la camara como si fuera de las ruedas.
    Por ahora arreglado,Le hicieron nuevamente el balanceo a las riedas Las llantas son de Nitrógeno. Un problema para mi las prefiero de aire
    mil besos
    L

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    1. La ansiedad también puede ser peligrosa, estimada Mucha, pero bueno, como todo, creo que es cuestión de intensidad y frecuencia, cuídate de ella y de todo mal, amiga. Como de usar el celular conduciendo, si no es una emergencia... Te contaré lo que nos dijo un estadounidense que vive en Los Ángeles y a quien tuve de profesor después de haber pasado él por Italia, decía que en Roma la gente conducía muy ágil, relativamente rápido, muy cerca unos de otros; aparentemente de forma muy loca, pero muy atentos, vivos y despiertos y que casi nunca pasaba nada. En California, sin embargo, contaba que la gente se subía a un todoterreno enorme con un café en una mano y el teléfono en la otra y que iban como idos; él decía que le daba miedo. Normalmente, aún con las dos manos en el volante, la muy probable falta de atención viene de la conversación en sí, ten cuidado... Aunque nunca estuve en Florida ni en ningún otro lugar de América (todavía), ten cuidado, por Dios.
      Nunca puse nitrógeno en las ruedas, pero no debería dar ningún problema,es un gas muy estable, evita comprobar la presión con frecuencia (en teoría nunca) y se utiliza en las ruedas de los aviones desde hace muchos años, ¿por qué no te gusta? Me resulta curioso.
      Lamento que hayas tenido ese problema con el coche recién estrenado, da muchas rabia, y es raro. Los pocos casos que conocí, con coches nuevos, fueron a causa de un defecto de fabricación en alguno de los neumáticos, que a veces son muy sutiles y difíciles de detectar, pero si te lo han revisado y reparado, lo suyo es que no vuelva a pasar. Con el “renting”, quizá tengas la posibilidad de cambiarlo si volviese a ocurrir; aquí algunas compañías dicen que lo hacen.
      ¡Suerte y feliz año!
      Un abrazo.

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  5. Feliz 2016 gracias por compartir tus sabios consejos,un abrazo

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    1. Gracias a ti, Amatista. Que disfrutes un año lleno de la magia de esta noche.
      Un abrazo.

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  6. El modernismo, estimado tocayo, ha superado, sobre todo para los que venimos de épocas muy remotas, toda expectativa.Mis nietos se asombran cuando les hablo de tiempos en que para combatir las moscas había que colgar del techo de las piezas unas cintas en que los insectos se pegaban a ellas. Hablo de comienzos de los años 40.Pero por otra parte, qué decepcionante resulta verlos a ellos mismos fanatizados por sus contactos por whatsapp, "lejos" de su entorno inmediato.Son contradicciones tan notorias como las que revelas en tu artículo, entre los inconmensurables progresos y los excesos.

    Abrazo.

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    1. Yo también he conocido esas cintas, amigo, y hasta utilicé en una ocasión uno de aquellos teléfonos a los que había que dar manivela, fue también en un pequeño pueblo de la montaña astur. Qué tiempos. A mí lo que más me asombra de estos es la devoción y entrega, la ciega fe que profesan tantas personas a las denominadas "nuevas tecnologías" sin cuestionarse siquiera si verdaderamente les resulta de alguna utilidad; y la dependencia que crean. Me recuerdan muchísimo a la historia de la Biblia que cuenta la adoración al becerro de oro y la soberbia que animó la construcción de la Torre de Babel. Tanto supuesto avance y una erupción solar vuelve locos a los satélites.

      Quizá hay mucha soledad en las almas y alejados de sentimientos religiosos vemos maravillas en cualquier reflejo de luz.
      Un abrazo.

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  7. Hola Esteban, como siempre un placer leerte. Cuánta sabiduria en tus palabras, o será sentido común lo que tienes a raudales. Tengo que volver al "redil" de leer y comentar a la gente que lo merece y tiene tanto bueno que decir, entre ellos tú sin duda.
    Un beso grande y feliz 2016

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    1. Muchas gracias, Asun. Me alegro que te guste, y mucho más aun saludarte y verte por aquí; pero no te preocupe nada si el tiempo no te alcanza, es como un agujero negro que nos absorbe a todos, así que disfrútalo cuanto puedas que acabamos de empezar otra etapa.
      Un abrazo.

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  8. Ola caro amigo,achei excelente e super informativo o texto que escrevestes. Muita saúde e felicidade neste Novo Ano,e aqui deixo meu grande abraço.SU

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    1. Muito obrigado, Suzane!
      Salud y felicidad también para ti y los tuyos.
      Un abrazo.

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  9. Amigo Esteban tus articulos deberian ser como una biblia poara ciertos conductotes
    Saludos desde Jerez

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    1. Sin palabras... me dejas sin palabras, Juan. ¡Muchas gracias!
      Un abrazo, amigo.

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