El inminente mes de agosto es el tiempo de vacaciones por excelencia en España, a pesar del dramático -a veces trágico- y altísimo porcentaje de desempleo. Creo que en buena parte del mundo también es época de descanso, pero aquí sucede una especie de fenómeno del que no tengo constancia de que ocurra en otros lugares y es que, desde mediado el mes de julio y hasta la segunda quincena de septiembre, en general, se instala “mentalidad de vacaciones” en el ánimo de la mayoría de las personas. Viene a ser algo así como la hibernación del oso pero en la estación contraria. En general, se ralentiza la actividad económica y laboral, se relaja la disciplina, se es menos exigente en la realización de las labores propias del papel de cada cual... No me gusta nada.
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| En vacaciones el automóvil presenta su mejor cara, si se la partimos nos haremos daño. |
Esta “aplicación” operativa en el “software” de nuestro cerebro es un riesgo añadido a la hora de conducir que conviene tener muy en cuenta para impedir que esté activa mientras estemos al volante, tarea que requiere de toda nuestra capacidad de atención y trabajo por evidentes razones de supervivencia propia y ajena. Y espero y deseo que mantengan esa actitud en cualquier actividad que hagan que implique riesgo; hay algo que llama poderosamente mi atención, y es el elevado número de personas (muchas veces niños) que pierden la vida en el agua de mares, piscinas, ríos, y pantanos. Es un fenómeno que comenzó hace pocos años y que va in crescendo. Me crié en puerto de mar y con la playa a quince minutos andando desde mi casa, casi nunca se ahogaba nadie, era algo rarísimo, no acabo de entender ni deja de asombrarme qué demonios pasa ahora. Es impresionante. Hace muy pocos días, afirmaban en la radio que en Andalucía, sólo durante este mes, ya habían muerto más personas ahogadas que en la carretera.
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| La mar puede estar brava y la carretera difícil, pero casi siempre se pueden ver los peligros a tiempo. Playa de San Lorenzo, Gijón (Asturias) |
Volviendo al asfalto, que es mi hábitat, he editado un vídeo donde muestro tres maniobras de adelantamiento en carreteras con dos carriles y doble sentido. No es la maniobra que más accidentes genera pero los que se producen durante la realización de la misma suelen ser muy graves, prácticamente siempre. Todas las maniobras deben ser pensadas y trabajadas con antelación, ésta, muy especialmente. Exige paciencia, actuar con mucha agilidad, lograr una diferencia de velocidad notable respecto al vehículo adelantado, respetar las normas que la regulan escrupulosamente y asegurarse perfectamente de que el sentido contrario está libre en un espacio inequívocamente suficiente, sin olvidar, que si apareciese un vehículo circulando en él, podemos estar seguros de que que acabaremos el adelantamiento (de nuevo en el carril derecho) sin “echarnos encima del adelantado”, sin obligarle a frenar, sin asustarle tan siquiera, unas cuantas decenas de metros antes de cruzarnos con ese posible vehículo, a cuyo conductor, naturalmente, tampoco debemos obligarle a levantar ni un milímetro su pie del acelerador.
Parece que en algunos dispositivos no se ve el vídeo (no sé porqué),
a quien le ocurra eso puede verlo aquí. Gracias.
En autopistas y autovías (al menos dos carriles para el mismo sentido), la maniobra se torna mucho más segura, sin embargo, puesto que la estupidez humana tiende a infinito como ya apuntaba el gran Albert Einstein, muchas veces provoca accidentes sin sentido. Estos accidentes, básicamente derivan de dos erróneas decisiones muy comunes: poner el intermitente e inmediatamente salir al carril izquierdo, como si eso nos diese derecho a algo, y hacer la maniobra con una diferencia de velocidad ridícula con respecto al vehículo adelantado, lo que eterniza la posición en paralelo. He llegado a medir hasta dos minutos (2’) el tiempo que un turismo estuvo en paralelo con un camión.
¿Soluciones? Actuar como si se tratase de una carretera con doble sentido, es decir, todo el espacio que en estas observamos libre antes de cambiar al carril izquierdo mirando al frente con el fin de evitar una colisión frontal, tenerlo también en cuenta mirando hacia atrás, pues si alguien nos alcanza las consecuencias pueden ser de similar gravedad a las del choque frontal. Y hacer la maniobra rápido. Y ante la más mínima duda, evitarla, esperar otro momento. Esta maniobra requiere paciencia, mucha.
A modo de consejos, sugerencias, recomendaciones... o como lo quieran llamar dejo aquí cuatro enlaces sobre cuatro entradas que escribí de cara a la Semana Santa de este año y el anterior. Creo que su lectura puede serles perfectamente válida también para este tiempo más largo de descanso, y espero que lo disfruten (a pesar de todo) sin que sufran ningún mal. Para más comodidad, adjunto los enlaces con las siguientes palabras:
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| Fuente: 3.bp.blogspot.com |
También quiero destacar, que abandonar las actitudes egoístas que tanto vemos en las vías urbanas es muy importante para nuestra seguridad, la de nuestros pasajeros y la de terceras personas. Por ejemplo: Hay una acción que se ve cada día en las vías de poblado, es cuando alguien decide parar y/o estacionar en mitad de la calzada para tomar o dejar a personas y/o cosas, impidiendo la circulación de los demás vehículos, cuando, a poco que se molestasen, pueden orillar el coche, utilizar el hueco de un vado... y permitir que los demás ejerzan su derecho a circular. Esto se ve cada día, en cualquier población. Y no les quepa duda, de que si ahí la velocidad es muy baja o ninguna y pueden pensar con toda tranquilidad, a 100 km/h, ésa actitud puede dar lugar a accidentes muy graves. Seamos generosos, el egoísmo tiene efecto boomerang.
Una última cosa, en casi toda España hace mucho calor durante el verano, y hace más difícil controlar la agresividad, la violencia y la ira. Don Miguel de Cervantes lo dijo muy bien: “Por la canícula ardiente está la cólera a punto”.
Muchas gracias por los vídeos. Me gustará mucho que los vea mi hijo mayor, para ver la diferencia entre conducir bien y simplemente 'hacer la pirula', cosa que los muy jóvenes tienden a confundir con conducir bien.
ResponderEliminarComo bien sabes yo sólo adelanto a tractores y bicis y poca cosa más. Me gustaría haber podido hacer clases de autoescuela de esta maniobra. Eso sí, practico en la autovía, y esto es suficiente para darse cuenta de los problemas que pueden aparecer.
Una pregunta: en un adelantamiento llovía: ¿puede haber problemas de diferencias de adherencia entre las ruedas que están en un carril y las que todavía están el el otro? (yo soy de los que no tenemos ESP).
Saludos!
¡De nada, Elisa! Me alegra que te gusten y que vayas instruyendo a tu hijo. Pero me da que tiene buena base, por sí mismo, y por vosotros. Yo tengo que mejorar lo de los vídeos, aunque es un poco complicado, pero aun así creo que pueden ser útiles, ayudar a "entrar en ambiente", mentalizarse bien y evitar "jugársela".
EliminarNo te preocupe que tus adelantamientos se limiten todavía a los vehículos que mencionas, cuesta decidirse, pero es importante no forzar, llegará el momento de un modo natural, además, lo tienes francamente difícil porque cuanto mayor sea la ciudad en la que se vive, más hay que alejarse para poder encontrar posibilidades de hacer adelantamientos en doble sentido. No obstante, en las autopistas y autovías se puede aprender mucho: conocer el coche, cómo reacciona a los incrementos de velocidad, valorar distancias y velocidades, calcular en qué punto nos cruzaremos con alguien que viene por la calzada del sentido contrario, etc. Y en la autoescuela, salvo excepciones, es muy difícil poder practicar adelantamientos en doble sentido, se necesita bastante tiempo (hay que alejarse), no hay garantía de poder hacerlos, aunque se esté dispuesto a invertir ese tiempo resultaría... si no caro, bastante poco asequible. Ahora, en Inglaterra los coches de autoescuela ni siquiera pueden circular por la autopista dando clases ni en exámenes, y, generalmente, se conduce francamente bien.
Efectivamente, sí que puede haber diferente grado de adherencia entre las ruedas de un lado y las de otro, buena pregunta. Normalmente inapreciables, siempre que los neumáticos estén en buen estado y con presiones adecuadas, que no haya demasiada agua en la calzada y que no nos encontremos con alguna mancha de gasoil o de aceite, casi imposible de detectar, pero afortunadamente muy, muy poco probable. Habitualmente, también conduzco coche sin ESP. No te preocupe. A ver si me explico: todos estos sistemas de seguridad, en general, están sobrevalorados; hombre, ya que existen, mejor tenerlos, pero muchas personas les atribuyen capacidades divinas y creen a pies juntillas que pueden hacer milagros, y no, claro, resultando más peligrosa esa fe que el hecho de que nuestros coches no lo tengan. Con estos sistemas, ocurre como con algunas vacunas, si no lo tienes, dada la excelente publicidad de la que gozan... pues, da cosa.
Con o sin ESP, en lluvia, ante todo, sentido común, calma y sosiego, y sentir. Sentir el coche es fundamental, cuanto más deslizante esté la carretera, más importante es sentir cómo pisa, del mismo modo que sentimos cómo se agarran nuestros zapatos cuando vamos andando por una acera mojada; y actuar con mucha suavidad, acelerando, frenando, cambiando de marcha, al soltar el embrague, al mover el volante... Estas son las claves y en este camino hay que perseverar por muchas siglas que tenga el coche que manejamos.
¡Saludos!
Tienes mucha razón en lo de sentir el coche. Y por cierto, ¿cuál crees que es la causa de que en Inglaterra conduzcan mejor?
EliminarSaludos!
Hola Elisa:
EliminarSi no surge ningún imprevisto, contestaré tus preguntas antes de que acabe el día, son muy interesantes y no quiero hacerlo deprisa y corriendo.
Disculpa el retraso, por favor.
¡Saludos!
(1)
EliminarAl final ayer apareció el imprevisto, nada grave, afortunadamente, pero si antes lo digo...
Bueno, voy con la primera pregunta. Como seguramente imaginarás, Elisa, las razones que te dé sobre porqué se conduce mejor en Inglaterra no son empíricas, precisamente. Se basan en mi observación, en lo que he vivido por allí y en lo que he hablado muchas veces con mi familia inglesa y amigos. Procuro ser todo lo objetivo que puedo y creo que lo soy casi al 100%, pero extraigo conclusiones de lo que yo he visto, aunque también hay algunos datos: Más o menos, la isla es la mitad de España, está más poblada, tiene más automóviles y, sobre todo, se utilizan más, la media de kilómetros recorridos por persona y año es claramente mayor, también tienen menos accidentes y menos víctimas de tráfico tanto en términos absolutos (con no mucha diferencia) como relativos (diferencia notable). Debido a la crisis, el número de vehículos circulando por España ha ido bajando de un modo progresivo -pero muy notable- desde 2006 acá, y también el número de kilómetros recorridos en los que lo siguen haciendo.
Básicamente, creo que en el Reino Unido se conduce mejor por tres razones: educación, mentalidad de la población y control policial. Logrando un equilibrio bastante bueno entre estos tres factores; aunque creo que el tercero se está exagerando en los últimos años, hay muchísimos radares con fines puramente recaudatorios y hará unos dos años se descubrió que un alto responsable de tráfico perteneciente a la policía cobraba comisiones de las empresas que los fabrican o importan. Fue procesado por ello.
El tema de la “mentalidad” de personas o sociedades, es un concepto muy escurridizo y de difícil definición, pero muy coincidente entra la mayoría de las personas. Son como esas cosas que nadie puede explicar pero que todo el mundo sabe y percibe. Desde luego, la mentalidad de una sociedad la moldea, fundamentalmente, su cultura y su educación-instrucción, tanto en casa como en la escuela. De acuerdo, los pecados capitales no conocen fronteras y todos somos víctimas de ellos (o de algunos), en mayor o menor medida, en ocasiones. Pero parece que en algunos lugares se peca menos y afecta a todo lo que se hace, también a la hora de conducir.
Hay dos cosas muy significativas que he observado en Inglaterra:
A los socorristas de una piscina cubierta -de lo que aquí sería un pequeño polideportivo- estar todo el tiempo en el lugar indicado para ellos y todo el tiempo controlando a los bañistas sin distraerse con nada ni con nadie. Vale, sólo fui a esa piscina y tres o cuatro veces; no sé qué pasará en todas las demás, pero aquí he ido a muchas más, en distintos lugares y en ninguna he visto a los socorristas trabajar así, es más, a veces, simplemente no están.
Los policías que controlan en la pantalla del escáner el equipaje de mano en los aeropuertos no quitan ojo a la misma. Aquí, no es nada raro que se les vea mirando a otra parte, hablando con algún compañero, etcétera.
Respecto a la policía, en materia de tráfico (lo demás no lo sé), trabajan bastante más que aquí; dentro de poblado, no tienen dependencia ni relación directa con la alcaldía de turno, lo contrario de lo que ocurre aquí, lo que es un verdadero lastre para su tarea pues los distintos gobiernos locales sólo toman decisiones en función de una elemental aritmética electoral, y lo mismo hacen los gobiernos autonómicos y el del Estado. Y hablando de políticos, los que forman parte de la clase dirigente inglesa no es que sean ángeles, pero la que tenemos aquí es corrupta, interesada y cainita, quiero creer que hay excepciones, pero es eso, un puro acto de fe. Con todo, lo que peor llevo de nuestros políticos es la cobardía, prepotencia y estupidez de la que hacen gala.
Por otra parte, entre nosotros, los de a pie, no existe (o a muy bajos niveles) sentido de grupo ni de comunidad, nos aglutinamos en uno u otro bando indistintamente en función del rédito personal que esperamos obtener, nada más.
(Y 2)
EliminarHace años, un amigo inglés me dijo que allí no hay que hacer reconocimiento médico ni psicotécnico para el permiso de conducir, y es cierto (otra notable diferencia entre nuestro sistema y el suyo), que sólo había que jurar que uno estaba bien y ya está. Entonces le dije que algunas personas mentirían descaradamente y me dijo: “No creo que mienta nadie, Esteban, porque si te pillan son 3 años de prisión”. Así, automáticamente, y claro, como la seguridad social es universal si tu médico ve algún motivo para que no conduzcas, te lo comunica y también a las autoridades de tráfico. Nunca olvidé aquella conversación, la respuesta de mi amigo fue contundente y espontánea, la expresó con energía y me cortó la risa que me había dado con lo del juramento (no me lo podía creer) cuando me dijo lo de los 3 años de cárcel. Así que con ese dato y otros de los que luego me fui enterando de otros países, he llegado a la conclusión de que el elevado grado de civilización que les atribuimos a los países del norte se debe en buena parte a una legislación bastante dura que se aplica de un modo muy universal y equitativo.
En nuestro país, la legislación de tráfico no es precisamente blanda, pero la mayoría de la gente no se la cree, o creen que no les afectará, “eso les pasa a otros”. Sin embargo, aquí también hay personas que acaban en prisión por delitos de tráfico, pero las normas no se aplican de forma sistemática a todo el mundo ni con la seriedad y rigor que se hace más al norte. Depende de quién sea uno, a qué grupo social pertenezca, dónde vive, con qué juez trate, qué abogado tenga, cómo actúe el policía de turno a pie de carretera, lo bien o mal que haga su trabajo, de la suerte... Y es muy curioso la fe ciega que hay en la suerte, muchas personas acaban en prisión, no por la comisión del delito en sí, sino por el quebrantamiento de su condena. En fin, el “Spanish is different” del que algunos se sienten tan orgullosos, desafortunada y generalmente, es un lástima.
¡Saludos!
Ciertamente tienes mucha razón. Aquí no pertenecemos a una comunidad, sino a uno de los diferentes grupos sociales que siempre están enfrentados. Somos una sociedad dividida y polarizada que no sabe llegar a acuerdos. Esta actitud se traslada a la conducción, de manera que en la carretera se presentan, a la vez, las diferentes 'escuelas', en una falta de convivencia nefasta y egoista que resulta ser un caldo de cultivo ideal para accidentes. El ejemplo de las rotondas que pusiste es perfecto. Divididos entre el que da la vuelta al ruedo y el que se cree con derecho de salir desde el interior 'porque el otro no tendría que estar aquí'... Para colmo creemos que nuestras responsabilidades se reducen a nuestra familia y allegados, así que si complicamos la vida a los demás, ¡pues que se apañen!...Es una pena y es nuestra perdición... Saludos!
EliminarA mí me da mucha pena, sí. Porque conozco personas que no responden al perfil general, incluso algunas empresas, entidades, grupos... Y también las ha habido a lo largo de la historia, claro que muchas de ellas han sufrido persecución, cárcel, muerte, exilio... Y me consta lo mismo de otras, que sólo conozco por lo que hacen, que en realidad, es como mejor se conoce a alguien, ¿verdad?
EliminarHay una frase atribuida a El Cid, muy políticamente incorrecta, pero que me encanta y creo que sigue siendo perfectamente actual, para infortunio nuestro: "¡Dios, qué buen vasallo, si hubiese buen señor!".
¡Saludos!
Esteban, muy buena entrada, ojalá y muchos analizarán y practicarán tus mensajes! Un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias, Mery. Yo también lo espero, en realidad, me consta que algunas de las semillas que lanzo germinan y seguramente algunas de ellas hasta se multipliquen.
EliminarNo cambiaré el mundo, claro, pero al menos quiero aportar toda la arena que quepa en mis manos para ello. De esa tarea no desistiré.
¡Gracias por tu ánimo y aliento!
Un abrazo.
Ola caro amigo,agradeço muito as felicitações e quero dar-lhe meus parabéns por postar um assunto tão importante e interessante.Meu grande abrço.SU
ResponderEliminar"Caro" es una palabra que ya casi nadie utiliza por aquí, pero me gusta mucho, principalmente se oía en la iglesia (ahora ni eso).
EliminarEl cumpleaños de tu blog es un excelente motivo para celebrar, conlleva mucho trabajo y constancia, lo haces muy bien y tres años es una cifra hermosa. Brindo porque cumpláis mucho más y podamos seguir disfrutándolo.
Muchas gracias por tus palabras.
Un abrazo, Suzane.
Me quedó una cosa en el tintero. Dices: 'he llegado a medir hasta dos minutos (2’) el tiempo que un turismo estuvo en paralelo con un camión'. Yo no lo he contado, pero creo que contaría todavía más tiempo en algunos adelantamientos camión-camión. A veces se forman hasta dos filas de camiones en paralelo durante largo rato mientras los turismos acaban yendo por el carril tercero. ¿Qué piensas de esto?
ResponderEliminarNo me gusta, es un factor de riesgo importante. Ir en pelotón no me gusta nada, ni andando. El caso que describes, por aquí, es raro verlo, los lugares más próximos en los que podemos ver eso están acercándose a Irún y a Madrid. Y seguramente no pocos de esos adelantamientos excedan de los 2’.
EliminarNo... “me he metido con los camioneros”, porque, a veces, puede tener su justificación y la raíz de esa forma de actuar está -una vez más- en las limitaciones de velocidad. Salvo que el camión sea viejo, llevan limitadores de velocidad, no los he probado, pero los amigos que tengo que conducen camiones y autobuses afirman que no puedes pasar ni 1 km/h del límite (100) ni cuesta abajo. Cosa que no sucede con los limitadores de los turismos, al menos los que yo he probado, bajando se pasan.
No soy muy crítico con este asunto (normalmente y salvo que abusen), porque en viaje largo es muy difícil poder hacer un adelantamiento camión-camión con poca diferencia de velocidad sin estorbar a algún turismo, y puede parecer que las ventajas de hacer la maniobra es insignificante, pero en ruta larga no lo es, y están todos los días en la carretera y deben cumplir horarios. Si con los límites de velocidad genéricos hubiese más diferencia por tipos de vehículos y los turismos pudiesen llegar a 140, al menos, en teoría y cuando hay más de 2 carriles, en el tercero no se producirían retenciones.
Ahora, para lo que no encuentro ninguna justificación es para que un turismo adelante a cámara lenta. No lo entiendo. En el fondo es la misma actitud que tanto recriminamos a nuestros mayores cuando les vemos cruzar la calle sin mirar y nos responden “¡ya pararán!”
Volviendo a los camiones, hay una cosa que hacen algunos de sus conductores que, ya no es que me resulte inadmisible, es un auténtico acto criminal (por el que nunca vi denunciar a la policía, por cierto) y es, cuando habiendo 2 carriles, circulan 2 camiones por el derecho, muy próximos, tu vas por el izquierdo para adelantarles y cuando estás llegando a la altura del segundo, éste pone el intermitente al tiempo que gira brusco el volante y se planta a una velocidad notablemente inferior a la tuya en tu trayectoria obligándote a hacer una frenada muy fuerte, a veces, casi de emergencia, para evitar meterte debajo. Esto es un acto criminal en toda regla, no tiene otro nombre. Ahora ha bajado también mucho el tráfico de camiones, pero es raro que en un recorrido de 400 km o más, no se vea algún adelantamiento de este tipo.
¡Saludos!
Hola Esteban:
EliminarPues debemos vivir en sitios muy diferentes porque por aquí, a la que sales de la zona metropolitana, el tráfico pesado puede resultar importante. Por ejemplo, el tramo norte de la AP-7 soporta un tráfico pesado muy elevado, debido a una falta total de alternativas (no hay alternativas ferroviarias y para más problema han prohibido a los camiones ir por 'la nacional', así que imagínate).
No he visto en ningún país de los que he visitado, que los turismos tengan que ir por la izquierda, encajonados entre una mediana sin arcén y una columna de camiones. Me parece un error de gestión importante, un riesgo a evitar haciendo las infraestructuras adecuadas (que quizás sean más baratas que llenar el país de aeropuertos desiertos).
La acción que comentas como inadmisible provoca muchísimas quejas de la gente de por aquí. En la zona metropolitana no, pero mucha gente que tiene una casita a una hora de aquí están hartos de sortear esta maniobra (no hace falta recorrer 400Km).
En mi opinión, un desastre de organización del tráfico, que crea constantemente peligros potenciales y evitables con una mejor gestión.
Saludos!
Hola Elisa:
EliminarSííí... Por aquí tenemos mejor calidad de vida, y no lo digo yo, esto siempre se lo he oído a los catalanes que vienen por aquí, y cuando llegan hasta Cantabria o Asturias les parece un paraíso. También se puede pensar, que bueno, están de vacaciones y se ven las cosas de otra manera, pero tuve una chica de Barcelona que sacó el carnet conmigo que trabaja y vive en Bilbao y seguía diciendo lo mismo, también hablaba de "otra mentalidad" más dispuesta a disfrutar y no tan centrada en el trabajo, no sé.
Bueno, pues tu crítica a la organización del transporte la comparto totalmente. No sabía que los camiones tenían prohibido circular por la nacional. Desde luego, lo que cuentas es una fuente de problemas y peligros que, en buena parte serían evitables, y hasta resultaría barato, comparado con tanta obra inútil como se ha hecho y a la que aludes con toda razón.
Antes me olvidé de un tramo de la antigua N-I (Madrid-Irún) que pasa por Guipúzcoa, ese será bastante parecido a lo que cuentas del norte de Barcelona, pero sólo afecta a una pequeña parte de esa provincia, mucho menos poblada que Barcelona, pero por ahí pasa casi todo el tráfico que viene de cualquier parte de Europa hacia Madrid, Lisboa y norte de África.
Esa maniobra criminal que tantas quejas provoca, ¿sabes si es más significativamente habitual entre los camiones con matrícula extranjera? Yo no la he sufrido muchas veces, y no estoy seguro, pero tengo la impresión de que la mayor parte de los camiones a los que les vi hacerla no eran españoles.
Gràcies i saludos!
Hola Esteban:
EliminarPues no he estado nunca en Asturias, ni en el País Vasco. Una lástima.
A los camiones se les ha prohibido circular por la N-II porque era una vía con alta accidentalidad. Ahora el tráfico pesado por la AP-7, en dicho tramo, ha aumentado el 60%. Está muy colapsada.
No he notado que las matrículas sean extranjeras. Otra cosa es que el conductor sea extranjero. Eso ya no lo sé. Y en general, sabes que creo que los camioneros conducen mejor que la media.
Saludos!
Hola Elisa:
EliminarPues desde luego, tenéis una autopista conflictiva (encima de peaje); vamos, que no podéis bajar la guardia ni una fracción de segundo.
Sí, los conductores de camiones y autobuses conducen bastante mejor que la media; lo hacen muy bien, generalmente. Es lógico, porque, en primer lugar es una cuestión de pura supervivencia, y en segundo lugar es su trabajo. Sólo un pequeño golpe de chapa que tengan supone retraso (y no digamos un accidente), pondrían en riesgo su empleo y sería más difícil encontrar otro. Aún así, y aún a riesgo de parecer un nostálgico, antes conducían mejor. A pesar de acompañar sus comidas con algo de vino y acabarlas con café, copa y puro. En serio.
De unos 15 años acá, más o menos, y desde que se subvenciona la obtención de muchos permisos de conducir "grandes" y la crisis, hay bastantes chóferes a los que en realidad, la carretera y conducir no les gusta. Me consta, porque me lo dicen amigos del mundo del transporte, que no son pocos los camioneros que conducen igual en seco que en mojado "porque llevan ABS y paran en nada", por ejemplo. Claro, así me explico cómo se ve a algunos pasar por la A-8 con la calzada llena de agua y lloviendo. En fin, el mundo del transporte ha cambiado mucho desde "que estamos en Europa". Ahora hay muchas grandes empresas, holandesas y alemanas, principalmente, con unas flotas enormes financiadas con renting, con todo asegurado... Como dice un amigo mío , y creo que tiene razón, les importa un bledo lo que pueda pasar, al día siguiente tienen otro camión, otro chófer y la indemnización correspondiente ingresada en la cuenta de quien corresponda. Antes parecía "tercermundista", pero sólo lo parecía, para mí era mejor.
¡Saludos!
Yo no puedo comparar porque antes no conducía y ahora tampoco soy ninguna experta. Me limito a coger el coche como mínimo cada dos días para ir donde sea a practicar, pero muchas veces salen dudas y me gustaría lo imposible: la opinión de un experto en ese preciso momento. La carretera no es un lugar 'previsible': un día está colapsada de camiones, el otro tienes ciclistas por delante, el siguiente te encuentras obras, al día siguiente algo te obstaculiza la visibilidad, y tienes que tomar decisiones de manera continua sin saber a veces si era o no la mejor. Piensas ¿era lo mejor que podía hacer? A lo que acostumbro a contestarme que no he tenido nunca ningún percance, espero que no sea simplemente un golpe de suerte.
EliminarSaludos!
Tú eres la experta, Elisa. En serio, dentro de tus limitaciones -que todos tenemos-, tú eres la experta. Con interés, trabajo, esfuerzo, ganas, entrenando, pensando, disfrutando con lo que se hace, esas limitaciones se van ampliando sin forzar y sin peligro. Tú lo has hecho, las has ampliado muy notablemente en muy poco tiempo, y lo sigues haciendo. Esas circunstancias cambiantes que mencionas, esas dudas que surgen... Nos asaltan a todos, a poco que tengamos dos dedos de frente, y no lo digo por halagarte, tranquilizarte... no, es que es la verdad. Y lo he visto en veteranos colegas y conductores profesionales, y en mí, por supuesto.
EliminarLo que me parece poco verosímil es cuando dices: "Piensas ¿era lo mejor que podía hacer? A lo que acostumbro a contestarme que no he tenido nunca ningún percance, espero que no sea simplemente un golpe de suerte." Seguro que la suerte ha influido muy poco y te has hecho digna acreedora de ella, pero esa respuesta que te das... usted disculpe, pero no me la creo. Y, con tu permiso, te voy a decir algo un poco provocador, pero cierto: Conozco conductores muy malos, con los que jamás voy de pasajero (me dan las llaves automáticamente si tenemos que ir en su coche) y nunca han tenido percances ni multas. Seguro que tú no te conformas con eso como respuesta.
Me llama mucho la atención cuando dices lo de la opinión del experto "in situ", lo he oído más veces, en realidad bastantes, pero siempre me ha resultado curioso, porque después de pensar en ello y esforzándome en recordar, sólo vagamente me viene a la memoria alguna vez que haya pensado lo mismo. Creo que es porque estoy tan concentrado en buscar la solución que aunque llevase al lado al mejor colega del mundo, a mi cabeza no le daría como para formular la pregunta tan siquiera. Sin embargo, sí recuerdo, que cuando empecé en el oficio de enseñar a conducir, sí eché de menos muchas veces llevar a mi jefe atrás para preguntarle qué hacer; de hecho, le di la lata bastante, después de acabar la jornada preguntándole cosas, seguro que unas cuantas veces se le enfrió la cena por mi culpa.
¡Saludos!
La verdad es que tienes toda la razón, el verano se cobra muchas victimas a lo largo de los tres meses, solo hay que intentar hacer paradas frecuentemente e ir con los sentidos en la carretera para intentar evitar el final de tu vida o la de los tuyos
ResponderEliminarMuchas gracias por vuestra visita y comentario.
EliminarPues sí, la clave es conducir con mucha atención y con una clara actitud en dedicar trabajo y esfuerzo en la tarea de forma constante. Esto cansa, por sí solo, así que cuando el cuerpo lo pida y sin dejarle que insista demasiado se debe parar y descansar unos minutos, cuantas veces haga falta, pero no necesariamente en períodos de dos horas como insistentemente nos recomiendan, pues en función de múltiples factores es posible conducir cuatro horas seguidas y tan frescos, como también puede ser necesario descansar a los treinta minutos.
Saludos cordiales.