No me gusta escribir entradas espoleado por noticias que aparecen en los medios de comunicación a pesar de que muchas de ellas sean una fuente de inspiración que el fenómeno del tráfico y el mundo del automóvil deparan sin cesar. Pero hay ocasiones, como hoy sucede, en las que me resulta imposible evitarlo. No pocas de esas veces, lamentablemente, y cómo no, el protagonista de la primicia es uno de tantos políticos que nos ha caído en desgracia soportar.
La noticia de marras completa pueden verla aquí. Fuente: www.elcomercio.es |
Me encontré esta mañana casualmente con un ejemplar del diario El Comercio, de Gijón, decidí echarle una ojeada rápida, hasta que me topo con un titular que me hizo frenar en seco: “Belén Fernández: Pasar de 120 a 90 kilómetros por hora puede reducir las emisiones un 25%”. No me lo podía creer, hice una pausa, volví a leer... y, sí, eso es lo que estaba escrito, no me había equivocado. Si fuese 28 de diciembre hubiese dado por hecho que se trataba de una inocentada y seguiría sin más ojeando el periódico.
Como es natural y bien pueden suponer, me quedé tan estupefacto como indignado, haciéndome preguntas... ¿pero quién es esta tal Belén? Hasta que vi que dicha señora es, nada más y nada menos, que la actual Consejera de Infraestructuras y Medio Ambiente del Principado de Asturias. Como es natural y bien pueden suponer, también despotriqué para mis adentros sobre la mencionada señora.
De acuerdo, hay cosas -por desgracia- mucho más graves por las que indignarse, y lo hago, por supuesto, resulta también inevitable, pero una cosa no quita la otra, ¿verdad? Uno tiene sangre en las venas y a veces se incendian como si llevasen gasolina. Y eso fue lo que me pasó cuando leí: “Hay que combatir por todos los medios la actual posición dominante del vehículo privado”.
Fuente: Linkedin |
Si la primera afirmación era mala, esta no tiene parangón. Jamás leí ni oí nada igual. ¿Ha vuelto el Santo Oficio y doña Belén toma el papel de Inquisidor General? ¡Qué pesadilla! Y esta señora dice esto en Asturias, donde a duras penas sobreviven los únicos altos hornos de España y de donde han salido millones de toneladas de acero para las fábricas de coches, única industria importante de este país, por cierto, con una deuda que ya supera el 100% del PIB. En Asturias, donde la industria que queda son migajas de la que hubo, donde no se percibe contaminación salvo en lugares muy concretos y en razón de quemar carbón o fuel para generar energía eléctrica, y siendo el carbón su riqueza natural más importante.
Mieres (Asturias) fue uno de los primeros lugares donde se comenzó a desmantelar la industria en España. Esta canción de Víctor Manuel lo recuerda. Fuente: leyendesasturianes.blogspot.com |
Y esto no es lo peor, lo peor, en mi opinión y con diferencia es ese: “Hay que combatir por todos los medios la actual posición dominante del vehículo privado”. ¿Quiere quitar los coches? Pues dé un paso más, señora mía, hágalo por decreto, promueva una ley... y deje sin automóviles a sus legítimos propietarios; indemnícelos -qué menos, digo yo- y deje a Asturias como el único lugar en el mundo donde no exista el vehículo privado. Se convertirá en el hazmerreír, no sólo del planeta Tierra sino del Sistema Solar, por lo menos. El deseo que expresa y cómo lo hace la delata, es propio de un tirano y su raíz ha de ser personal, necesariamente. Es imposible que sea de otro modo, y también es imposible que se haya equivocado, hay cosas que no brotan ni por error. Y surgen preguntas obvias, claro, como: ¿acaso usted no tiene coche, señora consejera? ¿Tampoco usa el vehículo oficial? ¿Siempre utiliza el transporte público? ¿Qué le ha pasado a usted con los automóviles, señora Fernández? Ha debido de ser terrible, mis condolencias.
Esteban
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Gostei de tudo por aqui...conhecendo aos poucos..voltarei vezes mais.
ResponderEliminarAprendendo espanhol..e ainda tendo algumas dificuldades para escrever.
abrazos mios.
¡Muchas gracias y bienvenida, Lia!
EliminarValoro y agradezco mucho tu esfuerzo y atención al leerme y escribirme, pues por más que nuestros respectivos idiomas sean hermanos y vecinos no dejan de ser una barrera, pero se entiende lo que escribes.
Un abrazo.
Estimado Esteban: Pues no sé si bajar de 120 a 90 baja la contaminación, aunque la verdad es que para ir a 120 hay que alejarse unos 20 Km de la ciudad. Pero no conozco las estadísticas al respecto.
ResponderEliminarSobre lo de acabar con el dominio del coche, pues no me parece una frase 'políticamente correcta', pero si vives en Barcelona o en Madrid (en continuo colapso circulatorio) la entiendes muy bien. De hecho, es que todas las ciudades que he visitado con una calidad de vida alta (desde Japón al Canadá pasando por Escandinavia) tienen legislaciones muy estrictas para los coches, e incentivan muchísimo el uso de la bici. Y no es que sean anti-coche, pero asumen que su costo 'social' en términos medioambientales y de seguridad (no olvidemos que el coche es el responsable básico de que los niños no vayan solos por la calle), hacen que tenga que tener un uso racionalizado. Saludos!
¡Hola Elisa!
EliminarSí disminuye la contaminación porque se reduce el consumo, eso lo he comprobado yo mismo unas cuantas veces, aunque no del mismo modo en todos los coches. De ahí a decir que las emisiones se “pueden” disminuir un 25% por cambiar el límite de 120 a 90... eso ya es pura especulación. Supongo que, al menos en teoría, se podrían hacer estudios que determinen esto con una cierta aproximación pero aparte de que resultarían complejos, caros y largos, me temo que sus conclusiones siempre serían bastante estimativas. Y luego hay que valorar los contras, sin duda muy variados e importantes. Además esto se refiere a Asturias, que es donde la señora Fernández ejerce su cargo de consejera; y, no estoy seguro, pero dudo que tenga competencias para decidir sobre su amenazante medida. Claro que para amenazas, la de la guerra que propone declarar al vehículo privado; esto, de verdad Elisa, creo que tiene que ser por una cuestión puramente personal de esta señora, y sí, es una mera opinión por mi parte, algo que simplemente intuyo, pero, por desgracia da la impresión de ser algo bastante habitual entre muchos de nuestros políticos. Yo no logro explicarme muchas cosas de otro modo, francamente. He sido testigo y hasta “víctima” por así decirlo de unos cuantos casos en los que una persona que detenta una cierta autoridad, en un momento dado, abusa de ella de forma totalmente gratuita.
Asturias, comparado con Madrid y Barcelona (en el aspecto que nos ocupa), es un paraíso. Bilbao ya es otra cosa, pero por lo que yo puedo ver aquí, muchas personas restringen por sí mismas el uso del coche cuando comprueban que no les interesa utilizarlo, aun así hay atascos, que se han reducido mucho a cuenta de la crisis, y también son un tanto artificiales a causa del tranvía, las zonas peatonales que se han ampliado mucho en los últimos años, reducción de espacio en las calzadas, ensanchamiento de aceras, el tiempo que muchos conductores emplean para buscar aparcamiento...
Del extranjero conozco muy poco y no dudo de lo que me cuentas, por supuesto, y supongo que sus buenas razones tendrán, sobre todo en Japón que tiene una densidad de población muy alta; países nórdicos y Canadá... ocurre todo lo contrario, salvo algunas ciudades, ¿qué problemas pueden tener de tráfico? Ahora, una cosa es incentivar el uso de la bici y el transporte público y otra lo que nos suele pasar tanto en España de polarizar las posturas y defenderlas con tal fanatismo que ya se olvidan las razones.
Hay una cosa que me sorprende mucho de tu comentario, Elisa, cuando dices “el coche es el responsable básico de que los niños no vayan solos por la calle”. Yo creo que hoy día, y sobre todo cuanto más grande sea la ciudad, un niño solo por la calle corre peligro independientemente del tráfico. Por cierto, no sé tú, pero en cuanto el comercio cierra yo me siento menos seguro en las calles peatonales.
En mis tiempos de niño, cuando hacía bueno y podíamos, teníamos la suerte de poder estar en la calle casi de sol a sol, apareciendo por casa sólo cuando sonaba la alarma del reloj biológico en busca de comida mientras nuestras madres mantenían lo que se podría llamar una responsable despreocupación. Digo yo.
Saludos i bona nit!
Hola Esteban:
EliminarUna cosa es el consumo que un coche puede hacer según su velocidad, pero otra cosa son los atascos que se crean cuando se reduce la velocidad. La verdad es que no sé hasta qué punto es una medida eficiente, entre otras cosas, he de reconocer, porque no me he informado mucho al respecto.
Sobre los niños, yo creo que cualquier niño de 9-12 años, si no fuera por el tráfico, podría ir y volver sólo al colegio, pero en esta franja de edad nadie los deja salir solos si han de cruzar un semáforo.
Saludos!
Tienes razón, Elisa. Lo que se ahorra por un lado se puede despilfarrar por otro; incluso sin atascos, también se tarda más tiempo en hacer igual recorrido, ¿compensaría el ahorro? No lo sé, pero desde luego no es tan fácil como parece reducir la contaminación en base a disminuir la velocidad. Yo creo que es muy difícil hacer un estudio serio sobre esto, influyen muchos factores y sólo medirlos ya es muy complejo. Y eso sin hablar de cómo influye una medida de este tipo en la economía y en la seguridad, que esa es otra.
EliminarEs verdad que el tráfico es un factor de riesgo considerable para los niños, pero yo creo que la mayoría de los padres valoraría de un modo bastante parecido, sino más, la exposición a otros peligros. Hay mucho desalmado por ahí suelto, ya sabes, a mí eso me da mucho miedo; y, sí, hay que ir soltando cuerda, es verdad, y mejor hacerlo progresivamente, pero... ¡uf! Cuando veo un crío que me parece que está solo por la calle (rara vez), siempre me paro a preguntarle si necesita ayuda... no te digo más.
¡Saludos, buen fin de semana!
Desgraciadamente, la mayoría de desalmados se encuentran escondidos dentro de nuestra vida cotidiana, y la mayoría de abusos (al menos en nuestro entorno) ocurren en el ámbito familiar, escolar, actividades extraescolares, internet, etc. Con lo cual la principal regla de seguridad es que tengan claro que cualquier cosa rara la comenten con los padres, especialmente si el adulto en cuestión les insiste en que no lo cuenten. Y desde luego, y especialmente para las chicas, creo muy recomendable saber artes marciales.
EliminarHace poco tuve ocasión de ver cómo los niños japoneses van y vuelven sólos de la escuela, desde primero de primaria. Pregunté si no tenían miedo de que los atropellaran y me miraron muy sorprendidos. ¿Cómo iban a atropellarles? Y ciertamente es difícil. Cruces con visibilidad 100% (está prohibido aparcar en la calle), guardias en cualquier cruce 'un poco difícil', y peatones con gran disciplina: se paran en cualquier semáforo rojo, por más que no venga nadie.
Saludos!
Totalmente de acuerdo con la primera parte de tu comentario, Elisa. Sólo añadir que también pensaba en otro tipo de peligros, como robos, secuestros para trasplantes y adopciones ilegales, agresiones gratuitas... y sabe Dios cuántas maldades más que cuando te enteras de ellas no sólo te sorprenden por el horror que suponen sino también porque jamás se te han pasado por la cabeza.
EliminarEl ejemplo de Japón me parece perfecto y totalmente aplicable en cualquiera de nuestros municipios, es fácil, barato y muy eficaz. Al hilo de esto, te diré que siempre me dio envidia la típica figura del policía de barrio que tantas veces hemos visto en las películas americanas. Es como utilizar halcones en los aeropuertos pata ahuyentar a los pájaros, yo lo vi algo en Gijón y Bilbao, en las carreteras de forma mucho más sistemática, y siempre inspiraban seguridad y tranquilidad. Es incomprensible que se desista de algo tan elemental.
¡Saludos!
Pues sí, yo también no hay nada como un guardia urbano organizando el tráfico. No hay máquina ni normativa que pueda mejorarlo. Lo de alguien que vive en Barcelona. Saludos!
EliminarTotalmente de acuerdo. Además, se da el caso de que tanto Gijón como Bilbao han perdido algo de población con respecto a los años setenta, pero la plantilla de policías locales aumentó muchísimo, y, sin embargo, antes se les veía mucho más regulando el tráfico; ahora, salvo en días de partido cerca de los estadios y muy poco más ya no lo hacen, es increíble.
Eliminar¡Saludos!
Como dice Elisa. Yo también estoy de acuerdo en promocionar el uso de la bici como hacen por Centroeuropa, al menos en las ciudades y para distancias cortas; para distancias largas es otra historia. Me gustó ver la filosofía holandesa, por citar un ejemplo donde todo el mundo en las ciudades se mueve en bicicleta. Creo que comentaste mi entrada al respecto en alguna ocasión.
ResponderEliminarSaludos.
Pues, amigo mío, yo no acabo de ver que el ejemplo de Holanda pueda prender aquí, salvo honrosas excepciones de las que Elisa es un perfecto ejemplo, seguramente tú también y... cuántos casos más conozco... ni llego a contarlos con los dedos de una mano. En España somos muy cafres, aún estamos en niveles muy bajos de educación y respeto, somos intolerantes, nos gusta imponer lo que a nosotros nos parece bien, tenemos una fuerte tendencia al fanatismo, a engañar, obligar o prohibir... Convencer con razones, discutir civilizadamente sin llegar al insulto o la descalificación personal es harto difícil.
EliminarConozco bien tres ciudades en las que se usa bastante la bici: San Sebastián, Gijón y Vitoria, por este orden; pues bien, el sentimiento de estar hartos de los ciclistas es casi unánime en las tres, hay conflictos todos los días y las autoridades competentes se mantienen al margen, salvo accidentes; para mí, que hasta dan órdenes a la Policía Local para que no se entrometan, en tanto personas mayores y niños corren un riesgo gratuito que no se merecen. Me temo que Holanda seguirá siendo un sueño para nosotros.
Buen fin de semana, un abrazo.
Amigo profesor,nuestra querida España esta llena de bastantes iluminados,por eso existen tantos imbeciles que los siguen
ResponderEliminarAsí es, amigo Juan. Casi no pasa un día sin oír alguna barbaridad por parte de quienes nos gobiernan, además, ya ni lo disimulan, ¡les da igual! Da hasta miedo ver la arrogancia e insolencia con la que detentan el poder.
EliminarUn abrazo.
Eres profesor y eres un filósofo,erlo te ayuda bastante en tu profesión
ResponderEliminarSaludos
¡Gracias Juan!
EliminarMe gusta pensar, desde luego, creo que desde siempre; entre otras, tiene la ventaja de que así no te aburres nunca ,y los alumnos me motivan muchísimo a ello porque quieras que no siempre andan pululando por la cabeza. Les estoy muy agradecido.
Buen fin de semana.
Claro. Tiene toda la razón. Y bajar a 0 kilómetros por hora reduce las emisiones en un 100%
ResponderEliminarDe perogrullo.
Habría que regalar a esta señora un buen juego de "chirucas" para que vaya a todas partes caminando y que se libere de una vez por todas de la posición dominante del coche.
Exacto. Yo también regalaría a nuestros políticos una cura de humildad, a semejanza de como hacían en la antigua Roma cuando al rendir honores a algún general victorioso lo rodeaban con esclavos que tenían por misión recitar constantemente en voz baja y a coro: “Recuerda que sólo eres un hombre”.
EliminarUn saludo y buen fin de semana.