SÓLO DOS FOTOS, DOS DETALLES.

Es tiempo de viajes, cuatro o cinco días de vacaciones -según dónde se viva- con motivo de la Semana Santa. Probablemente, muchas personas vayan de un lugar a otro en automóvil, este 2014 la Pascua llega bien adentrado el año, hay previsión de buen tiempo en general y para la mayoría son los únicos días un poco seguidos de descanso antes de las vacaciones de verano.

El año pasado y el anterior escribí en total seis entradas sobre estos días que he vuelto a releer y creo que siguen siendo perfectamente actuales, y también válidas para puentes, fines de semana, verano... y para cada día, en realidad. Dejo los enlaces al final.

Hay un par de detalles, sin embargo, que pasé por alto (si se dan cuenta de alguno más, por favor, háganmelo saber; lo agradeceré) y que son muy poco conocidos; teniéndolos en cuenta estaremos más protegidos en caso de accidente, de una frenada de emergencia o simplemente fuerte. Y nos ayudarán a ser más conscientes de la fuerza con la que nos puede golpear cualquier objeto suelto o mal colocado que llevemos en el coche cuando, por la razón que sea, este se mueve con violencia.

En la mayoría de los turismos, los asientos traseros se pueden volver hacia adelante comunicando habitáculo y maletero; el equipaje que llevemos en este, cuando esos asientos estén vacíos, podrían empujar los respaldos traseros hacia adelante haciendo que una multitud de objetos invadan el espacio destinado a las personas y aumentar el número de lesiones o agravar las ya existentes en conductor y pasajero en el supuesto de producirse un accidente, que, desde luego y ya de por sí, tendría que ser grave o muy grave. Si abrochamos los cinturones de las plazas vacías de ese asiento trasero, la posibilidad de que ocurra lo anteriormente descrito disminuye.

Cuando llevamos parte del equipaje en el asiento trasero, si sujetamos este con el cinturón correspondiente, evitaremos que la espalda del conductor o acompañante resulte golpeada si nos vemos obligados a realizar una frenada fuerte o de emergencia. Son unos sencillos gestos que disminuyen riesgos y evitan golpes, y como dije antes, nos hacen ser más conscientes de que el interior de un coche no es el salón de nuestra casa. 

Recuerden la fuerza que tenemos que hacer para evitar caernos cuando, de pie en un autobús y agarrados a la barra del techo, el chófer frena un poco fuerte. Los objetos que llevamos en el coche no se agarran, por ello debemos transportarlos bien colocados y sujetos, no vaya a ser, que en un momento dado, vuelen como proyectiles a discreción tomando por blanco nuestros cuerpos.

Que disfruten una feliz Semana Santa.

Esteban

ENLACES

Semana Santa 2012: Aquí, aquí, aquí y aquí.

Semana Santa 2013: Aquí y aquí.